Fintech es el acrónimo de las palabras inglesas “finance” y “techonology”- tecnología financiera, en español- y hace referencia a empresas que utilizan las nuevas tecnologías para transformar los servicios financieros. Muy vinculadas a las startups, las fintech utilizan plataformas tecnológicas para abaratar los costes y ofrecer servicios de manera más ágil y fácil de entender por los usuarios. España es el quinto país europeo en inversión fintech, emplea a 7.500 profesionales en nuestro país y se consolida con un ritmo de crecimiento interanual del 14%.

La disrupción de las nuevas tecnologías ha creado nuevas oportunidades en el sector financiero. Las fintech reflejan este escenario, ofreciendo productos y servicios o bien inexistentes o bien mejorados. Conocer las herramientas y plataformas tecnológicas, así como su enfoque en el sector de las finanzas son objetivos de los Programas de Desarrollo Directivo de IEN-UPM escuela de negocios.

Fintech, un nuevo modelo de negocio

El sector financiero es uno en los que más ha incidido la transformación digital. Innovación y nuevos modelos de negocio se dan la mano en las empresas surgidas al amparo de la Fintech. Entre sus características, agilidad y sencillez, tanto a la hora de ofrecer servicios como a la hora de contratarlos. Con sus nuevas soluciones y nuevos productos, cubren un espectro al que hasta ahora no llegaba las empresas más tradicionales. Imagen de Gerd Altmann en Pixabay Las áreas principales en las que se mueven son:

• Pagos y transacciones
• Finanzas personales
• Consultoría y comercialización de inversiones
• Asesoramiento de financiación a pequeñas empresas
• Distribución de productos financieros
• …

En nuestro país, las fintech han tenido una gran acogida, con alrededor de 400 empresas de esta índole y 245 millones de euros de negocio, lo que le sitúa en el quinto país europeo en inversión según el informe Finnovating FinTech Investment in Europe 2019. Quizá la razón de esta exitosa irrupción se deba al abaratamiento de costes, pero sobre todo a la aportación de valor añadido al cliente, ofertando soluciones que hasta el momento no se habían cubierto en el mercado.

Retos y desafíos

Los principales retos y reclamaciones del sector de las fintech pasan por los siguientes puntos:

• Aprobación de un sandbox regulatorio. En las economías digitales, hace referencia a espacios de pruebas de nuevos modelos de negocio sin regulación vigente.
• Aprovechar sinergias entre las Fintech y las entidades financieras tradicionales. Los acuerdos de cooperación e inversión entre banca tradicional y las fintech, favorecerá el desarrollo del sector.
• Respaldo de las instituciones públicas.
• Alianza de las fintech europeas.
• Internacionalización del sector, con la mirada puesta en América Latina.

Las fintech representan un mercado consolidado en nuestro país con unas perspectivas de crecimiento al alza. La irrupción en el sector financiero español no sólo ha dibujado nuevos modelos de negocios, también ha revolucionado la manera en que se proporcionan los servicios y productos al cliente, con el foco puesto en la innovación y aportación de valor.